Si alguna vez te preguntaste cuál es la primera novela de la historia, los especialistas coinciden al señalar que es Genji Monogatari. «La historia de Genji», como se la conoce al castellano, fue escrita entre fines del siglo X y principios del XI en Japón. La obra completa ya existía en el año 1007.
Murasaki Shikibu, su autora
A partir de numerosas investigaciones, los estudiosos determinaron que su autora fue Murasaki Shikibu. Sin embargo, es poco lo que se sabe de ella. En realidad, su nombre es un apodo. «Murasaki» es el nombre de su heroína ficticia, que aparece en la novela. En cambio, «Shikibu» significa «gabinete del ceremonial», cargo que ocupó alguna vez su padre. Por el contrario, sí se sabe con seguridad que formó parte de una familia noble durante el periodo Heian. Heredó las dotes poéticas de Fujiwara no Kanesuke, su bisabuelo, uno de los treinta y seis poetas inmortales del Japón. Además, su padre, Fujiwara no Tametoki, fue un buen literato.
Su fama de narradora le valió a Murasaki un puesto en la corte de la emperatriz Shoshi, cargo que ocupo durante más de diez años. Cuando la escritora pasó a ser parte de la corte de la emperatriz, ya se había casado, tuvo una hija y su marido había fallecido. Cuando Murasaki en el año 1012 dejó su puesto en la corte, vivió un año más, cuando murió a los 36 años.
Contenido de la primera novela de la historia
La novela está compuesta de 54 capítulos o rollos. El protagonista de la obra es Hikaru Genji, «El Príncipe Brillante», es hijo de un emperador y de su concubina. Sin embargo, tras perder su posición, abandona su estancia en la capital y viaja hacia las provincias. La historia se centra en la búsqueda de la felicidad por parte de Genji, quien trata de encontrarla mediante innumerables amoríos. Constituye toda una novedad la manera en que son descritas las motivaciones psicológicas de los personajes que intervienen en la historia, lo que hace que se la considere la primera novela.
Además, se tratan temas que no solamente preocupaban por los siglos X y XI, sino también en todas las épocas, como las reflexiones sobre la fugacidad de la vida y el carácter implacable del tiempo. La novela ofrece también una viva descripción de las costumbres de las familias de la nobleza japonesa.
«Perdido en mis pesares, no supe que los días y los meses siguen transcurriendo todavía… ¿De veras ha terminado el año y también mi tiempo en el mundo?»
La historia de Genji
Sin embargo, de los 54 capítulos de la narración solamente 42 se atribuyen a Murasaki. En los doce restantes los críticos han observados sutiles cambios de estilo en la técnica narrativa y otros elementos. Estas diferencias se la atribuyen probablemente a la hija de Murasaki, quien presumiblemente continuó la novela cuando falleció su madre.
Influencia
El Genji Monogatari es una pieza fundamental para la literatura japonesa. Influyo en escritores como Yasunari Kawaba (1899 – 1972), quien dijo: «La historia de Genji ha sido, pienso, por su índole, el libro del cuál más se ha embebido mi corazón». Además, en el reconocido escritor Haruki Murakami puede rastrearse la influencia de la obra de Murasaki Shikibu.
Por otra parte, en Occidente fue Arthur Waley quien realizó la primera traducción al inglés de la novela entre 1921 y 1933. Esta traducción fue la que conoció el escritor argentino Jorge Luis Borges, quien dijo: «La novela de Genji es una novela total, en algunos aspectos, superior al Quijote. Es una obra de arte jamás igualada». En el mismo sentido, Marguerite Yourcenar sostiene: «No se ha escrito nada mejor en ninguna literatura». Evidentemente, muchos grandes escritores supieron deleitarse con la primera novela de la historia.
La influencia del Genji Monogatari en Japón es tal que fue representado en distintos ámbitos artísticos. Así, en 1951, el director Koraburo Yoshimura realizó su adaptación cinematográfica. De la misma manera, en 1987 se realizó una película en el género del ánime. Además, la obra también fue llevada al teatro y adaptada a representaciones musicales.